Teléfonos móviles al detalle. Reviews y opiniones

Y por lo que a mí respecta no tengo más que añadir. Recomendable para personas que sólo lo quieren para llamar, o que quieran un teléfono de batalla que en caso de que se rompa no tenga mayor importancia.

Hoy os quiero hablar de un telefonito llamado Vodafone 226 (como veis ni es Nokia ni de ninguna otra marca de las más conocidas). A mi parecer es el terminal que reúne las tres características fundamentales que ha de tener un teléfono que sólo se quiere para llamar: es el más sencillo, pequeño y barato del mercado en estos momentos.


----------DISEÑO----------

Puede que no sea un Shine ni un Sirocco (desde luego que no lo es), pero en su ámbito a mí me parece muy bonito. Es negro por todas partes, excepto por sus cuatro lados, que están surcados por una lámina de metal plateado que le da un aspecto muy elegante. Por delante, estando apagado, tiene una estupenda presencia, pues además de tener un diseño de teclado bastante bonito el plástico transparente que cubre la pantalla, al ser ahumado, hace que toda la superficie se vea de un inmaculado color negro. Entre pantalla y teclado nos encontramos con el símbolo y la palabra Vodafone, pero en este caso, afortunadamente, no la han pintado del típico color rojo al que nos tienen acostumbrados, sino que es de color plateado, exactamente el mismo que os comenté que rodeaba el teléfono por sus costados. Así, desde luego, queda mucho más bonito, al menos para mi gusto.

En cuanto a sus dimensiones, estoy seguro de que a muchos le agradarán. Mide exactamente 103x46x11 mm, lo que lo hace considerablemente estilizado. Además, debido a que pesa muy poco (sólo 65 gramos) cuando se coge en las manos (especialmente las primeras veces) da la sensación de que el móvil no está completo. Es decir, que nos da la sensación de que nos hemos olvidado de ponerle la batería, la tapa de atrás o que le falta alguna pieza que se nos ha pasado por alto. Pero aparte de esta primera impresión el resto son beneficios. En la palma de la mano apenas si molesta, mientras que en el bolsillo de los pantalones casi ni se nota su presencia, aunque se trate de unos ajustados. Lo cierto es que ocupa lo mismo que unas cuantas tarjetas de crédito puestas una sobre otra, aunque la anchura es bastante menor, y esto se agradece.

El teclado es muy pequeño (todo el teléfono lo es). Las teclas numéricas se separan unas de otras por unos separadores horizontales que delimitan una fila de números de otra, mientras que no hay separadores verticales. Sin embargo, es difícil equivocarnos al pulsarlas, a menos que nuestros dedos sean grandes; en este caso probablemente tengamos algunos problemillas durante el envío de SMS. Entre el número 9 y la tecla # nos encontramos un orificio minúsculo que es la entrada al micrófono. En cuanto a los botones de navegación, se constituyen por dos teclas de selección (izquierda y derecha), teclas de llamada y cancelación y un pad central con movimientos arriba, abajo, izquierda y derecha, así como pulsación central. Cada una de esas teclas puede configurarse a modo de acceso directo, lo que es todo un detalle al ganarse bastante en comodidad.

El tacto al pulsar cualquiera de los botones es muy agradable; tanto que las primeras veces nos puede dar la sensación de que no hemos pulsado uno cuando en realidad sí lo hemos hecho. Pero aparte de esto se maneja bastante bien.

La tapa de atrás es de plástico negro, pero a diferencia del que constituye la parte frontal, que es totalmente liso, la trasera tiene un mosaico de figuras a modo de triangulitos desde un extremo a otro que le permite poseer una función antideslizante, por lo que no hemos de temer que se nos resbale y se nos caiga al suelo. Todo un acierto, a mi parecer.

En cuanto a conectores, sólo hay uno: el que permite la conexión del cargador. Se sitúa en el lateral derecho, en una zona donde el marco de metal se interrumpe y es sustituido por una cubierta de goma flexible de color negro. Para conectar el cargador hemos de retirar la goma hacia un lado (ésta nunca se llega a separar por completo del teléfono, por lo que no habremos de preocuparnos por que se nos vaya a perder) y entonces podremos enchufar el cargador a la toma que encontraremos en el hueco.

Con respecto a las cuestiones de limpieza, el Vodafone 226 se comporta de forma distinta en función de la zona que estemos observando. Así, la tapa posterior y el teclado son de un negro mate que impide que se queden marcadas las huellas, lo que permite toquetearlo sin que tengamos que preocuparnos por dejar el teléfono hecho un asco. En caso de que tengamos los dedos húmedos aparecerá una marca líquida en la zona que se haya tocado, pero se evapora casi al instante y no queda marca alguna (menos mal, ¿verdad?). Pero no todo el teléfono es así: la superficie de plástico que cubre la pantalla se mancha con bastante facilidad, y esto se ve muy favorecido por tratarse de una superficie de color negro, por lo que habremos de limpiarla con frecuencia. Sin embargo, el plástico es bastante resistente y no se araña a menos que le demos con algo que sea abrasivo, por lo que podremos limpiarla sin problemas con cualquier tela (o cualquier prenda que tengamos a mano) sin que vayamos a dañarla. El marco de metal es liso y las huellas se marcan con facilidad sobre él, pero apenas si se notan, por lo que podemos quedarnos tranquilos.


ESPECIFICACIONES TÉCNICAS

Pantalla. Como ya os he comentado el 226 es lo más sencillo que se despacha hoy día en teléfonos, por lo que no esperéis encontraros con una gran pantalla. A pesar de todo, he de deciros que se trata de una matriz de 128x128 píxeles (algunos Nokia que se comercializan hoy día tienen esos mismos píxeles en sus pantallas, y bien caros que se venden), de 30x27 mm y con 65652 colores de resolución. No es gran cosa, pero teniendo en cuenta que con este teléfono no nos vamos a dedicar a ver fotos ni a jugar ni nada de eso tampoco es que se necesite una mejor resolución. Se ve bien, aunque si inclinamos el teléfono se invierten los colores con rapidez. A la luz directa del sol nos quedaremos casi sin ver nada, pero dado que existe la opción de modificar la iluminación de la pantalla si la ajustamos al máximo se ve realmente bien (por defecto está ajustada en 50, pero podemos modificarla desde 0 a 100 en bloques de 10 en 10). Obviamente, si la dejamos permanentemente en 100 el consumo de batería será considerablemente mayor.

Batería. Según el manual del fabricante se trata de una batería de litio de 670mAh. No es precisamente la mejor (las hay de más de 1000mAh) pero en este caso esta capacidad es más que suficiente para obtener una buena autonomía, dado el bajo consumo de la pantalla (por sus reducidas dimensiones) y el hecho de que este teléfono no se usará para juegos o como reproductor multimedia, lo que acortaría considerablemente el tiempo de funcionamiento. En el folleto se indica una autonomía de 3 horas en conversación y 240 en espera. A mí me ha llegado a durar cerca de tres horas y media en conversación, aunque lo habitual son unas 3 horas. Durante una conversación la pantalla se apaga completamente transcurridos unos 20 segundos, lo que permite un mayor ahorro de energía, que siempre viene bien para arañar unos minutillos extra de batería. En espera, apagándolo por las noches y haciendo poco uso de él durante el día (un par de llamadas cortas y algún que otro SMS) me suele durar unos cinco o seis días, aunque esto es muy variable. El tiempo de carga es de unas tres horas, algo más de lo habitual para un teléfono.

Navegación por el menú. Como todo en este móvil se hace de forma bastante simple y rápida. Debido a que no tiene sistema operativo el acceso a las diferentes opciones y aplicaciones del terminal se hace de forma casi inmediata y no se producen cuelgues ni fallos por muy rápido que tecleemos. El menú consta de los elementos básicos, a saber:

Contactos. Permite asociar un número de teléfono a cada contacto, pero nada más. Olvidaos de añadir el teléfono de casa, el del trabajo y demás, así como el cumpleaños, la dirección de correo o la de casa, etc. Estas opciones no están disponibles. Sin embargo, sí se pueden establecer grupos (familia, amigos, etc.) a los que se les puede asociar un tono de llamada particular con el que identificarlos. También permite la marcación rápida, por lo que podremos asignar un número (del 1 al 9) para cada uno de los contactos a los que llamamos con mayor frecuencia. (Un consejo: aunque el 1 por lo general está reservado en todos los teléfonos para llamar al buzón de voz, en caso de necesitar ese número también para la marcación rápida basta con editar el número del buzón de voz y poner el del contacto que nos interese). Como podéis observar, el 226 es bastante sencillito, aunque no carece de las funciones más elementales.

Mensajes. El 226 permite el envío y recepción de SMS, FAX y e-mails exclusivamente. Los EMS y MMS no se pueden enviar con este terminal. En mi opinión esto no es ninguna tragedia, pues los mensajes que generalmente se envían con mayor frecuencia son los SMS, por lo que no hay de qué preocuparse. A la hora de escribir se puede utilizar el texto predictivo T9, que para quien esté familiarizado con él le será de gran ayuda. En la memoria del teléfono se pueden almacenar un máximo de 200 mensajes de texto, y éstos se clasifican en bandeja de entrada, mensajes enviados y borradores.

Llamadas. El 226 nos presenta la lista de llamadas enviadas, recibidas y perdidas, así como la duración de la última llamada y el tiempo total de llamadas entrantes y salientes. En esto creo que no tiene nada que envidiar a cualquier otro teléfono.

Configuración. En este submenú nos encontramos todas las opciones de personalización de nuestro teléfono. Desde aquí podemos cambiar el fondo de pantalla y el saludo inicial, modificar la intensidad de la iluminación, seleccionar el tono de llamada y su volumen, activar o desactivar la vibración y el bloqueo automático del teclado, así como las opciones de hora y fecha. Además, se pueden gestionar los desvíos de llamada y demás opciones del operador, como cabría esperar.

Extras. En este apartado nos encontramos con las siguientes aplicaciones:

Calculadora. Es muy simple, permitiendo la realización de las operaciones básicas: suma, resta, multiplicación y división. No esperéis otras operaciones más complejas porque lamentablemente no se encuentran disponibles.
Calendario. Se nos muestra la fecha actual y el mes en que nos encontramos, pero no nos permite añadir ningún tipo de cita o recordatorio, lo que considero un gran fallo dado que esto resulta bastante interesante hoy día.
MySudoku. Es el único juego que viene en el teléfono de fábrica, y permite tres niveles de dificultad, a saber: fácil, medio y difícil. Quieras que no, y a pesar de que la interfaz es bastante simple, es bastante probable que nos enganchemos.
Conversor. Es éste un punto que me sorprendió gratamente del teléfono, y es que no me esperaba que lo trajera. Permite la conversión de distintas magnitudes además de las conversiones monetarias (área, masa, volumen, etc.).
Menú Vodafone. Aquí se puede acceder a los contenidos del operador, pero recordad que ello conlleva un coste adicional, así que cuidado.

Alarmas. Es el último elemento del menú, y en él nos encontramos con la posibilidad de activar hasta tres alarmas distintas simultáneamente. Al activarlas podemos seleccionar si queremos que sea única o que se repita periódicamente, así como el sonido que queremos oír.

Y esto es, en esencia, todo cuanto se incluye en el menú. No hay cámara de fotos, ni reproductor de música ni de vídeo. Asimismo, tampoco existen posibilidades de personalizarlo con nuestros propios fondos y tonos, puesto que no tiene ni infrarrojos, ni Bluetooth, ni posibilidad de conectar ningún cable de datos. Debido a la imposibilidad de enviar MMS tampoco podemos utilizar este método para la personalización, como era de esperar. En este aspecto se echa en falta, al menos, un método de todos los anteriores, pero no es el caso. Sólo queda resignarse a utilizar lo que ya viene preinstalado de fábrica. Una pena.


----------CONCLUSIONES----------

Como habéis podido comprobar el Vodafone 226 es un teléfono espantosamente sencillo para los días que corren, en los que un móvil así parece haber quedado completamente desfasado. Sin embargo, he de deciros que yo estoy encantado con él, pues aparte de que lo considero muy bonito (no es para presumir de prestaciones, vale, pero tampoco es feo ¿eh?) también es muy pequeño y cómodo de llevar, lo que se agradece mucho. Además, he de deciros que los materiales que lo componen son de gran calidad (nada de plásticos malos y crujidos; el 226 es bastante resistente y causa una agradable sensación de solidez cuando lo tenemos en las manos).
Y aparte de todo lo anterior, se ha de mencionar que se trata de un teléfono muy económico. Si fuera de una marca prestigiosa como Nokia o Motorola (por decir algunas) probablemente nos costaría en torno al doble de lo que cuesta actualmente, pero dado que no presume de marca el coste ha quedado considerablemente reducido. La forma más interesante de comprarlo es mediante el pack teléfono + tarjeta prepago de Vodafone, y en la página lo ofertan actualmente a 19€, aunque hay tiendas donde se puede comprar a un precio más barato incluso.

Este teléfono de Nokia no puede dar mejor impresión. Cuando se ve por vez primera llama mucho la atención la gran superficie de pantalla que posee, que es enorme (2,4 pulgadas) en comparación con otros modelos. El frontal es de color gris plateado, y en él nos encontramos el teclado, cuyas teclas aparecen bien apretaditas en el extremo inferior, así como la cámara secundaria para videollamadas, el auricular y el sensor de luz, todo ello en el extremo superior.

La trasera se ve muy limpia (no está recargada de chismes como suele suceder con muchos teléfonos) y en ella sólo se ve la tapa de la cámara de fotos sobre la que aparece estampado el logo de Nokia. Al deslizar la tapa hacia abajo queda a la vista el objetivo de la cámara (que se activa automáticamente) y el flash, aparte de alguna información como la resolución y el tipo de lente que más abajo os comento.

En el lateral izquierdo sólo se observa el puerto infrarrojos, mientras que en el derecho se sitúan los botones de volumen y zoom, así como la tecla de captura de fotos y la de acceso directo a la galería de imágenes. Todas ellas son bastante cómodas de pulsar.

En el borde superior se sitúa uno de los dos altavoces con los que viene equipado el N73 así como el botón de encendido, en el centro. La parte inferior aloja el otro altavoz, la conexión del cable de datos/manos libres, el conector del cargador y la ranura de la tarjeta de memoria.

En cuanto al diseño a mí me gusta mucho, sin ser excesivamente llamativo pero destacando por su elegancia. Las teclas son pequeñas, por lo que aquél que se queje de tener dedos gordos probablemente tendrá problemas para pulsarlas, pero en caso contrario no hay motivos para preocuparse. Las teclas numéricas son mate, mientras que las restantes son de metal brillante, siendo bastante fácil que se queden las huellas marcadas, aunque no se notan mucho y basta pasar la mano por encima para quitarlas. El joystick (sí, chic@s, me volví a comprar otro teléfono con joystick, jaja) es pequeñito y de plástico. Según he escuchado con el uso la pintura que lo cubre se desconcha, pero en mi caso llevo un mes de uso y no le ha pasado nada aún. Espero que se mantenga así por mucho tiempo. Al pulsarlo ofrece resistencia, pero imagino que con el tiempo ésta se irá haciendo cada vez menor y “bailará” un poco. En fin, es una de las pegas que le veo a este teléfono, aunque de momento no me puedo quejar.

Algo que me ha llamado la atención es que los materiales con que ha sido fabricado el N73 no son tan buenos como en otros modelos, como sucede con el E60 o el N80 por ejemplo. Sí que es cierto que son más ligeros y hacen que el teléfono pese menos, pero al mismo tiempo los plásticos crujen un poco más de lo habitual. No digo que sean malos, ni tampoco que sea nada por lo que haya que echarse las manos a la cabeza, pero hay que ser honestos y comentarlo para que nadie se lleve a engaño en este sentido. Los de Nokia no se han lucido en este aspecto, no.

Y para terminar con el tema del diseño, sólo me queda decir que la parte trasera de la carcasa, que es mate, es muy suave al tacto y en caso de tocarla con los dedos húmedos se moja, apareciendo una marca de agua en el punto que hayamos tocado. Pero dicha marca desaparece casi al instante sin dejar mancha (siempre que no se trate de grasa). Y en cuanto al tamaño, se ha de decir que es más bien grandote, aunque para todo lo que trae no es demasiado. Mide exactamente 110x49x19 mm y pesa 116 gramos. Ni es el mayor de la serie N ni tampoco es el más pequeño. En los pantalones puede resultar algo incómodo a la hora de meter el móvil en el bolsillo, pues puede engancharse con la tapa de la cámara si no tenemos cuidado al hacerlo. Al sacarlo no se nos abrirá la tapa, pues hay que hacer una fuerza algo mayor para lograrlo, por lo que en este aspecto podemos estar tranquilos.


----------CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS----------

>>Pantalla. Como ya os he comentado, se trata de una matriz de 320x240 píxeles en una superficie de 2,4 pulgadas. Es realmente enorme, pero ello tiene como inconveniente que la nitidez no es tanta como la que poseen otras pantallas con igual número de píxeles pero menor tamaño. Aún así, es bastante nítida y a la hora de hacer fotos el tamaño se agradece, porque se puede ver realmente bien lo que estamos enfocando antes de hacer la foto. En mi caso no puedo decir que sea la mejor pantalla que he visto, porque como bien sabéis tengo un E60 cuya pantalla, a pesar de que es un poco más pequeña, se ve considerablemente mejor. Pero eso sí, con el N73 se puede navegar por internet o jugar o ver alguna peli sin tener que acercarnos tanto el teléfono a los ojos, por lo que no todo son inconvenientes.

Desde el menú podemos seleccionar la intensidad de iluminación que deseamos así como el tiempo en que debe permanecer encendida. A la luz directa del sol se pierden los colores pero se mantiene la visibilidad debido a que posee un buen contraste.

>>Batería. La que monta el N73 tiene una capacidad de 1100mAH, más que suficiente para proporcionar una buena autonomía. Según el fabricante, hasta 4 horas en conversación y 350 en espera. Personalmente en espera, usándolo poquito, me ha llegado a durar 7-8 días (apagándolo por las noches), y con un uso de alrededor de una hora de llamadas al día, un ratillo de navegación por los menús y un uso considerable de la cámara de fotos (alrededor de 100 fotografías) unos tres días largos. Es decir, que no hay problemas en cuanto a la autonomía de la batería. Eso sí, la navegación por internet chupa batería que da gusto, por lo que en unas dos horas y media o tres como mucho la habremos agotado por completo.

>>Cámara de fotos. Aquí encontramos una de las principales bazas de este teléfono. Se trata de una cámara de 3,2 MP, con una resolución máxima de 2048x1536 píxeles y con autofocus. La óptica es Carl Zeiss y la lente, Tessar. Posee un zoom digital de hasta 20x pero no óptico. Las imágenes salen nítidas y con buena luz ambiental son espectaculares, y aunque siempre digo que una cámara digital siempre será mejor que la de un móvil en este caso podemos decir que las diferencias ya son menores. En ambientes oscuros o de noche el flash, que es tipo led y bastante potente, se las apaña bastante bien, aunque eso siempre que lo que queramos fotografiar esté a un par de metros como mucho; más allá no conseguiremos iluminar gran cosa. De cualquier forma, de noche las fotos aparecen con algo de ruido (bastante poco en comparación con cámaras inferiores, aunque alguno aparece) y a veces se resaltan demasiado los colores, observándose una imagen no demasiado real. Aún así, no son defectos graves y desde luego con otras cámaras de fotos de otros teléfonos no se obtienen mejores resultados. Si hubiera que compararla con la de algún otro teléfono me decantaría por los SonyEricsson K800/K810i, cuyo sensor es prácticamente igual de eficaz y cuyo flash es incluso mejor que el del N73, puesto que es de xenón, al igual que el de las cámaras de fotos.

>>Symbian. Como todos los teléfonos de la serie N el N73 trae sistema operativo Symbian, lo que nos permite una gran cantidad de posibilidades tanto de personalización como de utilización. Al N73 se le pueden instalar reproductores de .avi y flash para ver pelis, lectores y editores de texto (Word, PowerPoint, PDF, etc.), mando a distancia para la tele, GPS (para lo que se necesita una antena que ha de ser comprada aparte), programadores de modos, reproductores de audio más completos que los que trae por defecto el teléfono, recordatorios, citas y tareas, cumpleaños, Messenger y un sinfín de otras aplicaciones que se pueden encontrar por Internet, siendo unas de pago y otras gratuitas. Como contrapartida nos encontramos principalmente con dos: que el teléfono es más lento que uno sin Symbian (esto donde más se nota es al encenderlo, tardando alrededor de 30-40 segundos) y que su precio es bastante más elevado. Aunque en este caso el tema del precio no es tan preocupante, puesto que al llevar ya un tiempecillo en el mercado ha bajado bastante de los 300-400 euros que costaba en sus comienzos. Hoy día se puede conseguir por los 30-50 euros a condición de hacernos un contrato o incluso por menos, por lo que podemos decir que el precio no es un impedimento importante para tener nuestro N73.

>>Reproductor de audio. El N73 viene equipado con un reproductor de música bastante sencillito que no da muchos problemas pero que puede resultarnos insuficiente en caso de que necesitemos más personalización. Permite reproducir los formatos más comunes así como crear listas de reproducción y elegir distintos ajustes para el ecualizador. El sonido se escucha realmente bien por los altavoces del teléfono, que si colocamos tumbado nos permite oír la música en estéreo. Con el manos libres la calidad de nuestras canciones es realmente espectacular. Por mi parte no hay quejas de ningún tipo en este aspecto.

>>Reproductor de vídeo. El N73 viene equipado con el RealPlayer y el FlashPlayer para poder reproducir vídeos. Aún así yo prefiero el DivxPlayer para reproducir pelis, mucho más eficaz y además gratuito. Pero para gustos, los colores, jaja.

>>Radio. El N73 posee radio FM, que dicho sea de paso se oye realmente bien. Para ello se necesita conectar el manos libres, pues el cable de éste se utiliza como antena. También existe la posibilidad de utilizar VisualRadio, que es una aplicación que permite ver imágenes al tiempo que se escucha la radio, pero este servicio es de pago y nada barato, por lo que por mi parte queda totalmente descartado.

>>Conectividad. El N73 incorpora casi todo lo que se despacha actualmente: Bluetooth, infrarrojos, cable de datos, GPRS y UMTS (3G). Con todo esto podremos intercambiar información de cualquier tipo y, en el caso de los tres primeros, sin que nos cueste ni un céntimo. Con la tecnología 3G podremos navegar por Internet a mayor velocidad que con GPRS (pero tened en cuenta que actualmente las tarifas son bastante caras) y al mismo tiempo podemos hacer y recibir videollamadas, para lo que se requiere disponer de cobertura 3G y que el teléfono de nuestro interlocutor también la tenga. Por lo que he podido comprobar con el Nokia N73 se hacen con bastante fluidez y el retardo no es excesivo, aunque como siempre digo esto depende en gran medida de la cobertura de la que dispongamos.

El único inconveniente que podemos encontrar en este aspecto es la ausencia de WIFI. Bien es cierto que no es algo fundamental en un teléfono, pero desde luego la posibilidad de podernos conectar al wifi de casa o al del vecino para poder acceder a Internet gratis no la tendremos. Una lástima, desde luego. Tampoco posee HSPDA, aunque si el 3G que está más extendido ya se usa poco esta tecnología apenas si se usará de momento por el público en general.


----------CONCLUSIONES----------

En general se trata de un teléfono bastante completo y sus prestaciones no son nada desdeñables. A su favor se encuentra, además, el hecho de que la marca Nokia suele ser una garantía de fiabilidad, aunque en su contra habría que reseñar la no tan buena calidad de los plásticos que constituyen la carcasa (que no son malos, pero los hay mejores).

Es un teléfono altamente recomendable tanto para los que disfrutan sacándole el máximo partido al Symbian como para aquellos que quieren una buena cámara de fotos, pero en mi opinión no es idóneo en absoluto para aquellos que no quieren o no necesitan Symbian. A ellos les recomendaría otros modelos sin sistema operativo que, además de ser más baratos, son más rápidos y tienen menor riesgo de cuelgues y de producirse fallos y errores.

Y creo que no me dejo mucho más en el tintero. Espero que no os haya aburrido con una opi tan laaaaaaaaarga jeje.